jueves, 14 de mayo de 2009

Mi nombre es Bond, James Bond


James Bond, agente secreto al servicio de Su Majestad, es un personaje ficticio creado por el británico Ian Flemig en 1952 y que dio el salto al cine una década más tarde. Varios actores han personificado a este espía en veinticuatro películas.

Bond es un personaje representativo de las películas de acción (persecuciones, coches, artefactos raros, chicas) pero también de la Guerra Fría (rivalidad por dominar el mundo, tensión extraordinaria entre los enemigos, acción de las diferentes agencias nacionales de espías, etc.)

Pero, curiosamente, los soviéticos no son siempre los malos de la película. Aunque muchas escenas introductorias se ambientan en un escenario de guerra fría, la mayor parte de las películas cuenta con una serie de villanos que, en general, pretenden apoderarse del mundo haciendo que las dos superpotencias soviética y norteamericana se enfrenten la una contra la otra para después gobernar sobre los restos. Aquí, la eficaz acción del 007 británico (agente con licencia para matar) será decisiva para aclarar las cosas. Un buen ejemplo sería “La espía que me amó” (1977). Y, entre los malos clásicos, citar al Doctor No, la organización terrorista ESPECTRE o Goldfinger.

A finales de los ochenta la Guerra Fría pierde fuelle, y hay que buscar “malos” nuevos. Esto es un problema que afecta a todas las películas de acción de Hollywood, y la saga de Bond también ha de enfrentarse a nuevos villanos: los narcotraficantes (licencia para matar, 1989), rusos que añoran la URSS (Goldeneye, 1995), un supermagnate de los medios de comunicación (El mañana nunca muere, 1997) o los coreanos del norte (Muere otro día, 2002).

Y otros cambios acechan a Bond: su jefe es ahora jefa, las chicas son guerreras, le limitan el presupuesto, ha de ser más sensible, pronto le harán dejar de fumar en las pelis... y, lo peor de todo, el vermouth se lo darán mezclado y no agitado.


Un página sobre 007, aquí . Y, en la misma página, un artículo que relaciona los diferentes Bond con su contexto histórico concreto

1 comentario:

Anónimo dijo...

en octopussy se ve bien el control de los sovieticos en la RDA
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